Durante el proceso de juzgamiento se pudo establecer que los directores del Banco Rural a portados fondos de la entidad para sobornar legisladores.
A partir de allí se generó una cadena de actividades ilegales realizadas para cubrir los préstamos fraudulentos utilizados para comprar apoyo político de los parlamentarios.
Los directivos del banco hicieron uso de mecanismos fraudulentos con el objeto de:
- Acelerar los contratos sucesivos- Renovar préstamos falsos
Delitos por el cual están siendo juzgados:
- Asociación ilícita
- Blanqueo de capitales
- Evasión fiscal
- Mala administración de la institución financiera
La Fiscalía General de Brasil dejó en claro que el Banco Rural ha violado las reglas establecidas por el Banco Central para los préstamos, a fin de proporcionar $32 millones (moneda brasileña), utilizados para financiar el plan diseñado para comprar la voluntad de los legisladores.
Fuente: Consultor jurídico (Brasil)
